Contexto: Hábitat III

En breves palabras, se puede definir la Agenda Urbana como “un documento estratégico, de adhesión voluntaria, que presenta la urbanización como un instrumento poderoso para lograr el desarrollo sostenible, tanto en los países en desarrollo como en los países desarrollados”. Sin embargo, el desarrollo de dicho plan debe entenderse en un contexto globalizado, ya que no existe una sola agenda como tal. 

En 2015, se sustituyen los Objetivos de Desarrollo del Milenio por los Objetivos de Desarrollo Sostenible, una guía más extensa y ambiciosa de 17 objetivos a los que aspirar para el año 2030, cubriendo un amplio abanico de sectores como educación, igualdad de género o cambio climático entre otros. Concretamente debemos fijarnos en el ODS nº 11 “Ciudades y Comunidades Sostenibles”. Es bajo los auspicios de este objetivo que se crea Hábitat III, en otras palabras, la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Vivienda y el Desarrollo Urbano Sostenible. Esta tuvo lugar del 17 al 20 de octubre de 2016 en Quito. El evento reunió Jefes de Estado y Gobierno, Ministros, gobiernos locales, sociedad civil, pueblos indígenas, sector privado y a la comunidad científica y académica, los cuales participaron en los procesos preparatorios de la Nueva Agenda Urbana, siendo uno de los procesos más inclusivos hasta la fecha. 

De acuerdo con los datos que aporta el ODS nº11, para 2050 la población se habrá duplicado de las que al menos 5.000 millones vivirán en ciudades, que a pesar de hospedar más de la mitad de la población, sólo suponen un 3% de la tierra. Así, se prevé que el nivel de urbanización siga su rápido curso y de ahí la preocupación debido a la interseccionalidad que presentan las ciudades, combinando aspectos de infraestructura, servicios básicos, actividades económicas, impacto ambiental, sostenibilidad, seguridad, empleo, educación, etc.

La Nueva Agenda muestra el compromiso con el desarrollo urbano de calidad, integrando la sostenibilidad con la inclusión y resiliencia en los asentamientos humanos, es decir, correlacionando buena urbanización con el desarrollo. Junto a la Declaración de Quito se desarrollaron además el Plan de aplicación para la Nueva Agenda Urbana y una Hoja de Ruta hacia Hábitat III. 

Nivel regional y local: Agenda Europea y Española

En líneas similares a las presentadas por las Naciones Unidas, la Comisión de la Unión Europea lanza en mayo de 2016 la Agenda Urbana para la Unión Europea, dentro del marco del Pacto de Ámsterdam. Según la UE, esto representa un método de trabajo cooperativo, de varios niveles, enfocado en fomentar el crecimiento, habitabilidad e innovación de las ciudades europeas, mientras que se resuelven las demandas sociales de manera eficiente. 

Esta estrategia se basa en tres pilares que afectan principalmente el diseño e implementación de políticas:

  • Mejor regulación: procesos más efectivos y coherentes, costes mínimos y sin cargas legales extras. 
  • Mejor financiación: identificar, integrar y mejorar mecanismos existentes a nivel institucional, incluyendo ESIF (European structural and investment funds)
  • Mejor conocimiento: intercambio de buenas prácticas e incrementar la información relacionada con temas urbanísticos. 

Además, la Comisión puso en marcha unas colaboraciones temáticas que engloban distintas partes interesadas junto con varios niveles gubernamentales. Son considerados los mecanismos de acción de la Agenda. Por ejemplo, en 2017 se presenta la “Malta Partnership”, la cual incluye colaboraciones en cambio climático o transición ecológica entre otras. 

De igual manera, podemos encontrar la Agenda Urbana Española (AUE), la cual se desarrolla a causa del necesario cumplimiento con las agendas anteriores. En el caso de la agenda española, ésta presenta un “Decálogo de Objetivos Estratégicos” con 30 objetivos y 291 líneas de actuación. La agenda también se alimentó de un proceso ampliamente participativo por lo que ofrece distintas líneas de acción independientemente de las características del pueblo o ciudad. Además de lo mencionado, la AUE contiene un diagnóstico de la realidad actual, un sistema de indicadores para evaluación y monitoreo de los objetivos y un Plan de Acción para la Administración General del Estado. 

Cómo participar

La Comisión Europea acompañó la creación y elaboración de la agenda con la creación de un portal web con el concepto de “one-stop shop”, lo que conocemos como el bazar que contiene de todo. La web ofrece a los distintos colaboradores la información necesaria en cuanto a políticas, instrumentos, temas prioritarios, etc. Esa web también ofrece los mecanismos para formar parte de un Partnership, si así se desea. Al registrarte como usuario, se te otorga la posibilidad de abrir debates, comentar las propuestas de acción  y seguir de cerca las demás colaboraciones, además de acceder a la newsletter mensual. 

Por su parte, la Agenda Urbana Española cuenta con una sección en su página web en la que se nos explica de manera similar cómo colaborar en los Planes de Acción. Como se ha explicado, uno de los aspectos clave de estas agendas es su carácter participativo. En el apartado de la página encontramos varios documentos que guiarán el desarrollo de nuestro propio Plan de Acción, así como todos los aspectos a tener en cuenta. Se incluyen las siguientes plantillas y documentos:

Es evidente la interrelación existente entre las distintas propuestas y distintas agendas que se han propuesto, en las que cada vez se cuenta con mayor participación e integración de la ciudadanía, ya que el cambio hacia la sostenibilidad se debe entender como un proceso colectivo y participativo para que sea eficiente.



Bibliografía